Porque ¿qué aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma? ¿O qué recompensa dará el hombre por su alma? Mateo 16:26
Si bien se escribió hace muchos años, la Biblia, la Palabra de Dios, es la revelación de la verdad de Dios para nuestro mundo. Y, entre las muchas verdades que revela, está la de la naturaleza humana, y que básicamente somos todos iguales: pecadores necesitados de la gracia divina. Esto incluye a los ricos y los poderosos. Los ricos y los poderosos de los tiempos bíblicos no eran diferentes de los ricos y los poderosos de los tiempos modernos, especialmente en su búsqueda de riqueza, fama y poder, muchas veces (aunque no siempre) a expensas de los vulnerables. Sin embargo, Dios demuestra el mismo interés por la salvación de los ricos y los poderosos que por los débiles y los necesitados.
Nabucodonosor
¿Qué consejo le dio Daniel al rey Nabucodonosor? Lee Daniel 4:27
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Por tanto, oh rey, acepta mi consejo: tus pecados redime con justicia, y tus iniquidades haciendo misericordias para con los oprimidos, pues tal vez será eso una prolongación de tu tranquilidad. Daniel 4:27
¿Se cumplió la palabra de Dios sobre Nabucodonosor por no querer reconocer a Dios? Lee Daniel 4:30-33
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Habló el rey y dijo: ¿No es esta la gran Babilonia que yo edifiqué para casa real con la fuerza de mi poder, y para gloria de mi majestad? Aún estaba la palabra en la boca del rey, cuando vino una voz del cielo: A ti se te dice, rey Nabucodonosor: El reino ha sido quitado de ti; y de entre los hombres te arrojarán, y con las bestias del campo será tu habitación, y como a los bueyes te apacentarán; y siete tiempos pasarán sobre ti, hasta que reconozcas que el Altísimo tiene el dominio en el reino de los hombres, y lo da a quien él quiere. En la misma hora se cumplió la palabra sobre Nabucodonosor, y fue echado de entre los hombres; y comía hierba como los bueyes, y su cuerpo se mojaba con el rocío del cielo, hasta que su pelo creció como plumas de águila, y sus uñas como las de las aves. Daniel 4:30-33
¿Nabucodonosor no engrandeció ni glorifico a Dios? Lee Daniel 4:34
Verdadero
Falso
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Mas al fin del tiempo yo Nabucodonosor alcé mis ojos al cielo, y mi razón me fue devuelta; y bendije al Altísimo, y alabé y glorifiqué al que vive para siempre, cuyo dominio es sempiterno, y su reino por todas las edades. Daniel 4:34
¿Qué podemos aprender de esta historia? En primer lugar, Dios utiliza a creyentes comprometidos, como Daniel, como puente para llegar a los incrédulos poderosos. En segundo lugar, Dios puede intervenir directamente en el proceso de testificación para alcanzar a los incrédulos poderosos. Dios humilló a Nabucodonosor por su orgullo y su arrogancia. Y, aunque esta fue una historia muy dramática, hay muchas otras maneras en las que los ricos, los poderosos y los arrogantes pueden ser humillados.
Naamán
¿Quién era Naamán y que enfermedad tenía? Lee 2 Reyes 5:1
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Naamán, general del ejército del rey de Siria, era varón grande delante de su señor, y lo tenía en alta estima, porque por medio de él había dado Jehová salvación a Siria. Era este hombre valeroso en extremo, pero leproso. 2 Reyes 5:1
¿Quién le hablo del poder de Dios a la esposa da Naamán y le dijo que había un profeta de Dios que lo podía sanar? Lee 2 Reyes 5:2-4
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Y de Siria habían salido bandas armadas, y habían llevado cautiva de la tierra de Israel a una muchacha, la cual servía a la mujer de Naamán. Esta dijo a su señora: Si rogase mi señor al profeta que está en Samaria, él lo sanaría de su lepra. Entrando Naamán a su señor, le relató diciendo: Así y así ha dicho una muchacha que es de la tierra de Israel. 2 Reyes 5:2-4
¿Naamán reconoció a Dios como su sanador y prometió ofrecer sacrificio solo a él? Lee 2 Reyes 5:17-19
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Entonces Naamán dijo: Te ruego, pues, ¿de esta tierra no se dará a tu siervo la carga de un par de mulas? Porque de aquí en adelante tu siervo no sacrificará holocausto ni ofrecerá sacrificio a otros dioses, sino a Jehová. En esto perdone Jehová a tu siervo: que cuando mi señor el rey entrare en el templo de Rimón para adorar en él, y se apoyare sobre mi brazo, si yo también me inclinare en el templo de Rimón; cuando haga tal, Jehová perdone en esto a tu siervo. Y él le dijo: Ve en paz. Se fue, pues, y caminó como media legua de tierra. 2 Reyes 5:17-19
La historia de Naamán ofrece un contexto para los no cristianos que se acercan a Cristo en la actualidad. Una lección que podemos aprender de la historia de Naamán es que los cambios de cosmovisión llevan tiempo. Como poderoso de Siria, Naamán tenía deberes que cumplir que suponían un reto para su nueva fe. Es importante que los nuevos creyentes, especialmente los que provienen de otras religiones, reciban apoyo y orientación para hacer frente a las exigencias culturales y sociales de su vida pasada antes de ser una persona de fe.
Recuerda, Naamán dejó su país impío como leproso y regresó como un hombre sanado y un discípulo del Dios creador. Acababa de comenzar su experiencia. Necesitaba tiempo para crecer.
Testificar a los instruidos: Nicodemo
¿Quién era Nicodemo y que pensaba sobre Jesús? Lee Juan 3:1-2
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Había un hombre de los fariseos que se llamaba Nicodemo, un principal entre los judíos. Este vino a Jesús de noche, y le dijo: Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no está Dios con él. Juan 3:1-2
¿Nicodemo defendía a Jesús y sus enseñanzas porque sabía que era el hijo de Dios? Lee Juan 7:50-52
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Les dijo Nicodemo, el que vino a él de noche, el cual era uno de ellos: ¿Juzga acaso nuestra ley a un hombre si primero no le oye, y sabe lo que ha hecho? Respondieron y le dijeron: ¿Eres tú también galileo? Escudriña y ve que de Galilea nunca se ha levantado profeta. Juan 7:50-52
¿Nicodemo estuvo presente cuando Jesús fue llevado al sepulcro y trajo mirra y aloes? Lee Juan 19:39
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También Nicodemo, el que antes había visitado a Jesús de noche, vino trayendo un compuesto de mirra y de áloes, como cien libras. Juan 19:39
Nicodemo era un hombre culto. La Biblia lo describe como un gobernante de los judíos (Juan 3:1). Jesús se refirió a él como maestro de Israel (Juan 3:10). Conocía bien la Biblia y tenía sed espiritual del Señor. Desde una perspectiva humana, podía parecer un seguidor de Dios. Guardaba todos los mandamientos y era un líder respetado entre los judíos. Era poderoso y rico.
Nicodemo fue a Jesús porque sus enseñanzas lo habían convencido. Su orgullo le impedía confesar abiertamente a Jesucristo como Señor, pero aquella noche lo cambió para siempre. Incluso después de convencerse de que Jesús era el enviado de Dios, siguió sin reconocer abiertamente que era seguidor de Jesucristo.
Misión en favor de los ricos
¿Quién era el joven rico? Lee Mateo 19:16-20
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Entonces vino uno y le dijo: Maestro bueno, ¿qué bien haré para tener la vida eterna? Él le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno sino uno: Dios. Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta?
¿Qué le responde Jesús para que pueda heredar la vida eterna? Lee Mateo 19:21
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Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Mateo 19:21
¿El joven rico hizo todo lo que dijo Jesús y lo siguió muy feliz? Lee Mateo 19:22
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Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones. Mateo 19:22
La interacción de Jesús con el joven rico muestra lo peligrosa que puede ser la riqueza. Fíjate en estas palabras: “Repito: Es más fácil que un camello entre por el ojo de una aguja, que un rico en el Reino de Dios” (Mat. 19:24). Esto, por supuesto, no significa que los ricos no puedan salvarse, sino solo que, si no tienen cuidado, sus riquezas pueden ser realmente un impedimento para la salvación.
Misión en favor de los poderosos
Jesús sabía cómo hacerse amigo de los poderosos. Muchos de ellos lo admiraban y lo respetaban, y al mismo tiempo, también muchos lo despreciaban. Los poderosos de la Biblia que acudieron a Jesús en busca de ayuda seguramente sintieron que él se preocupaba por ellos.
¿Quién era José de Arimatea y que hizo por Jesús? Lee Mateo 27:57-58
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Cuando llegó la noche, vino un hombre rico de Arimatea, llamado José, que también había sido discípulo de Jesús. Este fue a Pilato y pidió el cuerpo de Jesús. Entonces Pilato mandó que se le diese el cuerpo. Mateo 27:57-58
¿José de Arimatea tenía gran influencia ante Pilatos porque era miembro del noble concilio? Lee Marcos 15:43
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José de Arimatea, miembro noble del concilio, que también esperaba el reino de Dios, vino y entró osadamente a Pilato, y pidió el cuerpo de Jesús. Marcos 15:43
¿Que hizo José de Arimatea con el cuerpo de Jesús? Lee Lucas 23:53
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Y quitándolo, lo envolvió en una sábana, y lo puso en un sepulcro abierto en una peña, en el cual aún no se había puesto a nadie. Lucas 23:53
Para estudiar y meditar
El amor de Jesús es el mismo por los pobres que por los ricos y los poderosos del mundo. Murió tanto por los príncipes como por los indigentes. Jesús conocía la manera más eficaz de llegar al corazón de ellos. Nos advirtió que “es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja que un rico entre en el Reino de Dios” (Mar. 10:25). Ellos necesitan la salvación tanto como los demás; aunque, por desgracia, no se den cuenta de ello debido a la sensación de “seguridad” que creen que les ofrece su riqueza.
“Mucho se ha dicho con respecto a nuestro deber hacia los pobres desatendidos; pero ¿no debe dedicarse alguna atención a los ricos desatendidos? […] Miles de ricos han descendido al sepulcro sin que nadie los previniera. Pero, por muy indiferentes que parezcan, muchos de ellos andan con el alma cargada” (Elena de White, El ministerio de curación, pp. 160, 161).