"Y todo lo que hagan, háganlo con todo el corazón, como para el Señor y no para los hombres; seguros de que recibirán del Señor la recompensa de la herencia; porque ustedes sirven a Cristo el Señor". Colosenses 3:23-24
La mayoría quiere vivir una vida “exitosa” y feliz. Por supuesto, en un mundo caído, donde en cualquier momento puede ocurrir una tragedia o una calamidad, este meta no siempre será fácil de alcanzar.
Luego, también, está la cuestión de cómo definimos el “éxito”. Tenemos el caso de José en Egipto; si alguna vez hubo una vida exitosa, sin duda seria esta, ¿verdad? De la prisión al palacio, ese tipo de cosas... Por otro lado, ¿qué podemos decir de Juan el Bautista? Fue de la cárcel a la tumba. ¿Cuán exitoso fue su vida? Una vez más, todo depende de cómo definimos el “éxito”.
Vayamos por partes
¿En qué momento de nuestra vida los seres humanos deberíamos acordarnos y tener presente a Dios? Lee Eclesiastés 12:1
Leer versículo
Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y lleguen los años de los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento. Eclesiastés 12:1
A medida que los jóvenes maduran y llegan a adultos, surgirán pensamientos relacionados con tener que satisfacer las necesidades básicas: comida, ropa y techo.
¿Qué dice Jesús acerca de cuál debería ser nuestra prioridad? Lee Mateo 6:33
Leer versículo
“Busquen primero el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas” Mateo 6:33
¿Qué voto le hizo Jacob a Dios, que decisión importante tomo? Lee Génesis 28:20-22
Leer versículo
E hizo Jacob voto, diciendo: Si fuere Dios conmigo, y me guardare en este viaje en que voy, y me diere pan para comer y vestido para vestir, y si volviere en paz a casa de mi padre, Jehová será mi Dios. Y esta piedra que he puesto por señal, será casa de Dios; y de todo lo que me dieres, el diezmo apartaré para ti. Génesis 28:20-22
Es conveniente tomar decisiones en el ámbito espiritual y laboral o vocacional antes de contraer matrimonio. Tu futuro cónyuge debe saber “en qué se está metiendo”. Esta persona, ¿es un cristiano comprometido? ¿Qué clase de trabajo hará? ¿Será maestro, enfermo, abogado, obrero, lo que sea? ¿A qué tipo de vida me integraré? Otras preguntas que necesitan respuestas antes del compromiso matrimonial son: ¿Qué nivel de educación ha alcanzado? ¿Qué cantidad de deuda ingresará al matrimonio? ¿Estoy dispuesto a aceptar esta situación como parte de mi responsabilidad?
La bendición del trabajo (Idealmente)
A menos que seas rico de forma autónoma, o que seas beneficiario de un fondo fiduciario que mamá o papá crearon para ti a fin de que nunca tengas que trabajar en tu vida (si lees muchas historias sobre estos niños, el dinero, pensado idealmente como una bendición, a menudo les provoca una tragedia como adultos), tarde o temprano tendrás que trabajar para ganarte la vida.
¿Qué trabajo le coloco Dios al hombre antes del pecado? Lee Genesis 2:15
Leer versículo
Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase. Genesis 2:15
Y a Adán se le dio el trabajo de cuidar el huerto. El Creador sabía que Adán no podía ser feliz sin una ocupación. La hermosura del huerto lo deleitaba, pero esto no era suficiente. Debía tener un trabajo para poner en ejercicio los admirables órganos de su cuerpo. Si la felicidad hubiera consistido en no hacer nada, el hombre, en su condición de santa inocencia, habría sido dejado sin ocupación. Pero aquel que creó al hombre sabía lo que convenía para su felicidad; y no bien lo hubo creado, le señaló un trabajo.
¿Qué dice la biblia sobre el deber de hacer algo con nuestras manos? Lee Eclesiastés 9:10
Leer versículo
Todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque en el Seol, adonde vas, no hay obra, ni trabajo, ni ciencia, ni sabiduría. Eclesiastés 9:10
Lo ideal, por supuesto, es encontrar algo que te apasione y que también te pueda generar buenos ingresos, capacitarte en ello, encontrar un trabajo y vivir de eso durante tus años laborales. Ese es el ideal; por supuesto, no siempre resulta así.
¿Qué consecuencias hubo después del pecado, que le dijo Dios a Adán? Lee Genesis 3:17
Leer versículo
Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida. Genesis 3:17
Sin embargo, aun después de la Caída, cuando (como con todo lo demás) el trabajo había sido contaminado por el pecado, Dios maldijo la tierra “por amor de ti”, por el bien de Adán, con la idea de que el trabajo sería algo que él necesitaría, especialmente como ser caído.
Los años productivos
Esta parte de nuestra vida (los años de trabajo) suele durar unos cuarenta años. Para muchos, este es el momento de tener hijos y de educarlos, y de adquirir la casa y otras compras importantes. Este puede ser un período muy intenso desde el punto de vista financiero. Es una etapa muy sensible, porque la familia está aprendiendo a trabajar en conjunto y sus miembros están creando lazos para toda la vida.
¿La biblia dice que es importante proveer para las necesidades de nuestra familia? Lee 1 Timoteo 5:8
Verdadero
Falso
Leer versículo
Porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo. 1 Timoteo 5:8
El estrés financiero puede arruinar el matrimonio en esta etapa, y ocurre con frecuencia. Las familias en las que ambas partes tienen un compromiso cristiano y están dispuestas a seguir los principios bíblicos son mucho más estables.
¿En toda labor que se emprende con esfuerzo hay fruto? Lee Proverbios 14:23
Leer versículo
En toda labor hay fruto; mas las vanas palabras de los labios empobrecen. Proverbios 14:23
En muchos casos, el marido es el principal sostén de la familia, aunque a menudo ambos cónyuges trabajan. Por supuesto, pueden surgir circunstancias inesperadas (enfermedad, recesión económica y otras) que dificulten este ideal.
¿Qué dice la biblia con respecto a los hijos? Lee Salmos 127:3
Leer versículo
He aquí, herencia de Jehová son los hijos; cosa de estima el fruto del vientre. Salmos 127:3
Debemos recordar que los hijos traen consigo una gran responsabilidad. El objetivo de los padres cristianos es educar a sus hijos para que se conviertan en adultos independientes en esta vida y prepararlos para la vida venidera.
Estos tres aspectos ayudarán a los padres:
1. Proveer un entorno cristiano en el hogar.
2. Enseñarles a tener disposición y aprecio por el trabajo.
3. Contribuir a una buena educación.
Trabajar con integridad
Otra fase de una vida “exitosa”, la última fase, tiene el potencial de ser la más placentera, si las decisiones de los primeros años han sido sabias y no se han arruinado por hechos inesperados. En una situación ideal, los padres han criado a sus hijos para que sean adultos independientes, la vivienda está pagada, las necesidades de transporte están satisfechas, no hay deudas pendientes y hay un flujo de ingresos suficiente para satisfacer las necesidades de la familia de los adultos mayores.
¿Qué nos dice la biblia que vale más el buen nombre o las riquezas? Lee Proverbios 22:1
Leer versículo
De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas, y la buena fama más que la plata y el oro. Proverbios 22:1
La Biblia registra casos de empleadores que reconocieron que fueron bendecidos por tener un empleado piadoso. Cuando Jacob deseó dejar a su suegro Labán y regresar con su familia a su tierra natal, Labán le rogó que no se fuera, diciendo: “Halle yo gracia en tus ojos, y quédate. Me he dado cuenta de que el Señor me ha bendecido por tu causa” (Gén. 30:27). Y cuando José fue vendido como esclavo en Egipto, su amo, Potifar, hizo una observación similar sobre el trabajo de José y lo recompensó por ello.
¿Quién estaba con José y quien vio eso? Lee Genesis 39:2-4
Leer versículo
Mas Jehová estaba con José, y fue varón próspero; y estaba en la casa de su amo el egipcio. Y vio su amo que Jehová estaba con él, y que todo lo que él hacía, Jehová lo hacía prosperar en su mano. Así halló José gracia en sus ojos, y le servía; y él le hizo mayordomo de su casa y entregó en su poder todo lo que tenía. Genesis 39:2-4
Al trabajar, administrarnos económicamente o cualquier otra cosa que hagamos, debemos hacerlo todo para la gloria de Dios. Él es quien nos da el conocimiento y la fuerza para triunfar en la vida.
Buscar consejos piadosos
Hay decenas de gurús seculares sobre el manejo del dinero, pero Dios nos advirtió que no los consultáramos para la administración de los bienes que él nos ha confiado. “Dichoso el hombre que no anda en el consejo de los malos ni se detiene en el camino de los pecadores, ni se sienta en silla de burladores. Antes en la ley del Señor se deleita, y en su ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de agua, que da su fruto a su tiempo, su hoja no cae, y todo lo que hace prosperará” (Sal. 1:1–3).
¿Es bueno confiar en nuestra propia prudencia antes que confiar en Dios? Lee Proverbios 3:5
Verdadero
Falso
Leer versículo
Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Proverbios 3:5
¿Es bueno ser sabio en nuestra propia opinión? Lee Proverbios 3:7
Leer versículo
No seas sabio en tu propia opinión; teme a Jehová, y apártate del mal. Proverbios 3:7
El consejo bíblico nos brinda elementos muy valiosos para seguir:
1. Organízate.
2. Gasta menos de lo que ganas.
3. Ahorra una parte de cada período de pago (Prov. 6:6–8).
4. Evita las deudas como a la COVID-19 (Prov. 22:7).
5. Sé un trabajador diligente. “El perezoso desea mucho, y nada alcanza; pero los diligentes serán prosperados” (Prov. 13:4).
6. Sé fiel a Dios, en lo financiero (Deut. 28:1–14).
7. Recuerda que esta Tierra no es nuestro verdadero hogar.
Para estudiar y meditar
“No puede ser perfecto o completo ningún proyecto de negocios o plan de vida que abarque únicamente los breves años de la vida actual y no haga provisión para el futuro eterno. [...] Nadie puede acumular tesoro en el Cielo sin descubrir que de esa manera se enriquece y ennoblece su vida en la Tierra” (Ed 144, 145).
Debido a la presión de mantener a nuestra familia, muchas veces pensamos que nuestro trabajo es simplemente para proporcionar un ingreso. Pero, como cristianos, también se nos plantea hacer nuestra parte en la Gran Comisión que Jesús les dio a todos sus seguidores. Después de citar esta Comisión según se encuentra en Marcos 16:15, Elena de White escribió: “No quiere decir esto que todos sean llamados a ser pastores o misioneros en el sentido común de la palabra; pero todos pueden ser colaboradores con él para dar las ‘buenas nuevas’ a sus semejantes. Se da la orden a todos: grandes o chicos, instruidos o ignorantes, ancianos o jóvenes” (Ed 264).
** Algunos texto fueron extraídos de: Guía de Estudio de la Biblia (Lecciones de la Escuela Sabática) Edición para Adultos Enero a Marzo de 2023.